Prevenir la violencia ejercida en contra de la mujer tiene múltiples beneficios de índole económico, político, social y de salud, sostuvo la secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), sección 27, Blanca Águila Lima.
Al inaugurar las actividades con motivo del "Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer", la líder sindical enumeró como beneficios como la mejora en la salud de los niños y las niñas, en la productividad económica y los niveles educativos; la reducción de enfermedades de transmisión sexual, de enfermedades mortales y del abuso de sustancias, entre otras.
En las instalaciones del teatro "Ignacio García Téllez" del Instituto Mexicano del Seguro Social de Tlaxcala, en donde estuvo acompañada del Secretario de Salud de la entidad, Alberto Jonguitud Falcón, enfatizó que la violencia contra la mujer no puede ser vista en el país con naturalidad y que debe ser combatida en todos los ámbitos.
Ante trabajadores del Sector Salud de la entidad, la también secretaria general de la Federación de Sindicatos al Servicio del Estado respaldó la campaña ÚNETE, impulsada por jefes de los organismos de las Naciones Unidas (ONU), como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y ONU Mujeres, en la que hacen un llamado a la solidaridad con las sobrevivientes y los defensores de sobrevivientes y derechos de las mujeres que trabajan para prevenir y poner fin a la violencia de género.
Mencionó que si bien los datos reflejan que la tercera parte de la población femenil mundial sufre violencia, en ningún país se imputan responsabilidades a los agresores y que por el contrario se culpa a las víctimas e, incluso, de manera sistemática se duda de su testimonio.
Abundó que el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer tiene como objetivo combatir los históricos desequilibrios de poder, que es la causa por la cual el acoso sexual y otras formas conocidas e identificadas como violencia de genero están profundamente arraigadas.
No se llama solamente a una solidaridad, sino también a intensificar esfuerzos para encontrar soluciones, porque es prevenible este problema de salud pública mundial que ya sabemos que tiene un impacto muy fuerte en nuestras mujeres y en nuestras niñas
Antes de finalizar su discurso, Águila Lima refirió que en esta ocasión la ONU insta a honrar las voces de los activistas, y a escuchar y creer a las sobrevivientes para así contribuir a poner fin a la cultura del silencio y la impunidad.